Monumento Natural de
Andalucía.

“ Llegamos ante la sabina y le pregunté por su edad. Me dijo que, según todas las apariencias, podría tener diez siglos. Sentí el vértigo del paso del tiempo bajo su sombra. Me sentí efímero y pequeño bajo aquel árbol que había resistido al tiempo y las hachas, que sabía del paso de tantas civilizaciones bajo sus ramajes, que había presenciado la llegada de mil primaveras.”
Julio Alfredo Egea, 1997.
Se trata de un ejemplar de Juniperus
thurifera único en la provincia de Almería por sus grandes
dimensiones y su antigüedad que ha sido estimada entre 600 y 1.000
años.
Es un auténtico paradigma de
la resistencia a las condiciones más extremas de temperatura, capaz
de soportar los veranos más ardientes y los mayores fríos
invernales.
Ubicado en una antigua zona de cultivo
de secano, destaca llamativamente en un entorno caracterizado por
albergar otras especies como piornos, majuelos y tomillos, y algunos
otros pies rastreros de sabina albar de gran porte.
Es uno de los recorridos aconsejados para todos aquellos que les gusta el senderismo y las rutas de montaña, a ella sólo se puede acceder andando o en bicicleta.
